Habitaba en mí una nostalgía,
¿qué sería esa rara punzada?
era como sentir que te tenía
y al mismo tiempo no estabas...
No comprendía.
Reflejé en el agua mi mirada,
en aquél estanque dónde me abrazabas,
y como espejo de tu eco
tu imagen en mis pupilas se quedaba.
¿Dónde estás? tan cerca y tan lejos,
tan lejos y al lado, ¿qué estaba sucediendo?
¿No se iba a detener nunca el tiempo?
instantes eternos agonizando mi alma.
Y entonces lo supe...
aquella punzada era la espera de quién ama,
y entonces comprendí,
que al esperarte...te extrañaba.
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